PUNCHI´S CORNER


Hablo desde el corazón y por la necesidad, como plumilla, de hacerlo. Para compartir una nota, una ilusión, un comentario. Periodista de título, con la lucha por la igualdad como profesión, pretendo compartir reflexiones y análisis de lo divino y lo humano desde la humildad de ser una persona anónima y la consciencia de que hay blogs mucho más profesionales y trabajados, aunque todos tenemos derecho a ejercer la libertad de expresión y las nuevas tecnologías lo facilitan.
Maternidad, alimentación, vida sana, moda, estilo de vida, política, cosas bonitas... Un poco de todo con afán de compartir.

miércoles, 25 de enero de 2012

MAREA VIOLETA

En cuanto se saca el tema y con la psicosis colectiva que vivimos, es idea generalizada que las políticas sociales hay que sacrificarlas.
Ante esa generalidad, el feminismo reacciona. Y las feministas, déjense ya de chorradas, no llevamos el pelo corto y la cara lavada. Somos gente profesional y no profesional, de campo y de ciudad, con tacones y con chanclas de cuero. Todos los apelativos que nos desprestigian son un vehículo más de toda la maquinaria patriarcal que nos denosta al siempre papel de "con la pata quebrá" aunque lo vistan de Hellow Kitti.

Es por ello que las personas más preparadas y críticas, gente que se plantea de dónde viene la leche y no se conforma con abrir el frigorífico y que siempre haya un brick, han convocado la MAREA VIOLETA contra las políticas que están volviendo a sacrificar al 50% de la población porque ahora es momento de reducir, no de invertir.
No son unas histéricas, no están locas, son gente como tú y como yo, que les gusta Bustamante o Joaquín Sabina, que se compran ropa en Zara y que sueña con ir a Nueva York en lugar de tenerlo como cita normal y habitual para ir a las rebajas del Soho.
Si no fuera por ellas, tú, mujer, no irías a votar, no estarías trabajando de jefa de departamento por tu valía, no irías a tomar cubatas sin tener que pedir permiso y no tendrías una cuenta bancaria libre de inspecciones masculinas ajenas. No me imagino a una Clara Campoamor expresando en el parlamento: "bueno sí, participo pero os dejo a vosotros que saquéis la votación adelante que me tengo que ir a hacer la cena". Hay que ir a por todas.
Si tú nunca has tenido miedo de buscar un trabajo y que se planteen escogerte porque vas a tener hijos y vas a querer ir al médico con ellos, si tú nunca has tenido miedo de ir con unos pendientes gigantes porque te pueden juzgar tu profesionalidad, si tú nunca te has planteado reducirte la jornada para cuidar a tus hijos puesto que quedarte trabajando más horas te da remordimiento, si tu hermano ha cuidado cinco veces menos de tu madre enferma que tú por ser mujer (seguramente porque él trabajaba y tú no, eras ama de casa), es posible que entiendas que las medidas a favor de la conciliación y para la igualdad de oportunidades son imprescindibles.
Si te parece que una mujer tiene que demostrar el doble su valía para que la consideren apta de ocupar un puesto de responsabilidad, si te parece que tu madre hizo el doble de esfuerzo que tu padre por acompañarte en todas las etapas de tu vida o incluso si te parece injusto que tu madre haya renunciado a trabajar fuera de casa dejando sus sueños profesionales a un lado para que tú tuvieras la cama hecha y la comida caliente, deberías de apostar por un cambio de vida. Para atrás ni para coger impulso. Cabe soñar, y para soñar, no hay que ir en chandal y ser una feminista histérica, se puede ser fashion victim y tener ideas. Léete este manifiesto.
http://colectivofeministasenmovimiento.wordpress.com/2012/01/20/que-es-la-marea-violeta/

No hay comentarios: